Hace no mucho tiempo me propuse ahorrar el 50% de mis ingresos; de todo el dinero que entraba, la mitad se iba a ahorros e inversiones.
Podrías decir: “wow, ya me gustaría poder ahorrar tanto”. Pues déjame decirte que para mí, no fue sostenible.
Pero antes de contarte el porqué, una fotico de Nina:
Vacas flacas y vacas gordas
Uno de los primeros consejos que escucharás sobre finanzas personales es el típico, “ahorra el 10% de tus ingresos”.
¿Por qué 10%? ¿Quién dijo que ese número se adapta a todas las personas en todas las situaciones? La realidad es que no se adapta.
Alguien que vive mes a mes, apenas sacando para sus necesidades básicas, ni de pedo puede aparte ahorrar el 10% de sus ingresos. Es irreal.
Pero para alguien que gana mucho dinero, ahorrar el 10% quizás no representa gran cosa y podría ahorrar mucho más.
Además, muchas personas tienen ingresos y gastos variables, hay meses de vacas gordas y meses de vacas flacas. Un mes podrías no tener la capacidad de ahorrar absolutamente nada y el mes siguiente ser capaz de ahorrar el 50% de tus ingresos.
A lo que voy, ¿por qué habrías de ahorrar siempre un 10-15% de tus ingresos cuando hay tanta variabilidad en tu vida?
Mejor, ahorra lo que puedas y deja de castigarte cuando la situación no lo permita. Yo no podía evitar sentirme mal cada que no podía llegar a mi meta inventada del 50% de ahorro.
Como dice Nick Maggiulli en su libro Just Keep Buying:
Muchas gracias por leerme 🖤